B I O
Danza del Vientre
Allá por el 2007 en medio de una profunda depresión, llega a mi vida la danza del vientre de la mano de una amiga de una amiga. Me mostró un par de movimientos que estaba aprendiendo y me convenció a ir a clases con ella.
Comencé en la escuela de Larisa Russo y desde la primer clase algo sucedió.
Por primera vez en meses sentí que mi mente respiraba.
En los últimos minutos de clase las luces se ponían tenues, tomábamos un velo y nos dejábamos llevar por la música. Hasta el día de hoy disfruto mucho esos minutos al finalizar la clase, donde la danza está bien viva en el cuerpo.
En el 2008 comencé a estudiar más regularmente con Déborah Menciones y a fin de ese año conocí lo que se conoció popularmente como “Tribal Fusion bellydance” a través de internet.
Me cautivó por completo un video de Rachel Brice y Kami Liddle del 2005.
En 2009 comencé a estudiar este estilo de la mano de Emine Di Cosmo mientras paralelamente seguía por un año más con danza árabe.
Ya en 2010 estábamos conformando un trio con dos compañeras a modo de practicar lo que aprendíamos con Emine en los intensivos. Bailamos por todos lados. Distintas fiestas, teatros, peatonales, playa.
En 2011 me mudo a Buenos Aires y tengo la oportunidad de estudiar con Emine de manera semanal.
Afortunadamente desde el 2010 también se empiezan a popularizar los Festivales con Workshops intensivos como el OPA! Fest y el Che Tribal.
Allí tengo la oportunidad de estudiar con Lore Rojas, Ceci García (Mex), Mardi Love, Mira Betz, Jill Parker, Kami Liddle Elizabeth Strong, Steven Eggers, Samantha Emanuel, Caro Dumanni y más adelante en su tour mundial, con Kristine Adams en un evento que co-organizamos en Montevideo.
En 2014 y 2015 tuve el gusto de ampliar mi práctica semanal con las clases de Julieta Maffia en Buenos Aires.
Ese año decido mudarme a Córdoba y mientras que no me fue posible estudiar con clases presenciales me mantuve entrenando y aprendiendo mediante DVDs y también en Datura Online.
En 2022 tuve la maravillosa oportunidad de volar al Infusion Emporium (UK) y estudiar con Rachel Brice, Sadie Marquat y Alexis Southall en la ciudad de Wolverhampton, no sin antes pasar por Rennes, Francia y tomar dos workshops maravillosos de la mano de Illan Riviere.
Mi formación continua principalmente mediante Datura Online.
Yoga
Allá por el 2013 mientras daba clases de Danza, se había despertado en mí una necesidad de profundizar en conocimientos de Anatomía y Biomecánica.
También se venía despertando la inquietud de que “había algo más” que unía al cuerpo con las emociones.
Mira Betz nombró en uno de sus talleres el concepto de “Fascia”. Ese tejido que nos cubre completamente y donde se suelen “almacenar” las emociones. Es por ello que cuando bailamos muchas horas es probable que lloremos o que nos sintamos más sensibles.
Todos los caminos que investigaba me llevaban a que primero debía estudiar Yoga, por lo que me anoté en un instructorado lo más cerca de mi casa posible, en ese entonces en Quilmes, Buenos Aires.
Estudié dos años y enseguida fui motivada por mis profesores a comenzar a dar clases.
En el 2018, de vuelta en Montevideo me animo a probar con el Ashtanga Vinyasa de la mano de Ana Penadés.
Ese mismo año conozco a Alejandro Chiarella en un intensivo de 3 días y en ese momento supe que quería seguir por este camino.
En 2019 cursé el Instructorado de 200 Hrs junto a Ashtanga Baires y al año siguiente tuve la fortuna de formar parte del equipo de Om Yoga Uruguay, escuela dirigida por Ana Penadés.
Desde ese entonces el Ashtanga se volvió parte de mi cotidiano.
Me ayudó a profundizar muchísimo en mi cuerpo, me dio resistencia física y también emocional.
Actualmente soy docente allí, en el centro de Montevideo.